Ciberataques a vehículos conectados podrían bloquear ciudades enteras.

Muchas gracias, Internet de las cosas (IoT): ya nos has traído vehículos autónomos y otros coches conectados que pueden convertirse en derviches giratorios de acero / vidrio / combustible, como Jeep Cherokees que pueden ser paralizados por cibercriminales remotos a 10 millas de distancia y su volante pueden girar 90 grados mientras el vehículo se mueve a 60 kmh.

Esos fueron ataques únicos y de prueba de concepto en coches individuales, llevados a cabo por los reconocidos investigadores de seguridad de vehículos Charlie Miller y Chris Valasek.

Pero ¿y si los hackers realizaran un ataque coordinado y distribuido? ¿Pasaría como en un ataque de denegación de servicio (DoS) en el que varios coches fueron zombificados estratégicamente, de tal manera que engulleron una intersección crucial?

Más información

#HablemosDeSeguridad

Vía @cybersecurityES